viernes, 18 de diciembre de 2009

Perdonen por la siguiente entrada.

Llevo dos días en los que echo de menos mi falso yo.
Antes de esta actitud, tenía un escudo para defenderme de todo, me daba igual si lo que me rodeaba era bueno o malo.
Una actitud llena de ironía, de insultar a quien se me pusiera por delante, no respetar ninguna ideología, querer destruir todo hasta quedar sólo yo.

Lo peor es que últimamente echo de menos ser así, aunque me encanta ser como soy y lo más importante, me siento feliz.
Intento mantener una sonrisa, crearla en cada rostro de quien aprecio, ayudar a todo el mundo ya sea amigo o enemigo.

Ahora mismo noto un bucle que me está atrapando, estoy harto de ver como las personas que menos se esfuerzan, que más asco dan (Con perdón) consiguen cosas que yo no puedo conseguir.
Estoy frustado de que a todo el mundo le caiga bien, y cuando pida compartir algo conmigo, un camino, un tiempo, pase de ser un tío genial a "inexistente".
Sigo luchando por ser buena persona, para evitar dañar a los que me rodean, y parece que la gente no lo valora.


Puedo poner inmumerosos ejemplos.


Ayer me encontré un viejo conocido, y al final salió la conversación de las relaciones y el sexo (Y por extraño que parezca, precisamente yo no la quería iniciar).
Me dijo que soy un idiota por no aprovecharme de las mujeres ahora que tengo físico, que él estaba con dos a la vez engañandolas.

Lo mejor de todo es que aplaudimos estos actos, y luego la gente que somos todo lo contrario acabamos hasta las narizes.

Yo sé que en clase muchas veces puedo ser muy pesado y que no callo ni debajo del agua, sin embargo nunca busco herir a la gente.
Hoy teníamos día libre en Afos, y como somos tan inteligentes nos hemos puesto a discutir de que queríamos hacer y la profesora nos ha puesto a bailar, cosa que personalmente odio.

Entonces cuando hemos empezado he suspirado, y una de clase se ha sentido ofendida "supuestamente" porque estoy insultando a su cultura.
Primero la cultura latinoamericana me encanta, sus construcciones, el uso de plantas medicinales la música popular, simplemente he suspirado porque no me gusta bailar.
Luego en latín se ha puesto borde y ha comenzando a decir que soy un imbécil y que no tengo respeto a nada.
Sino te tuviese respeto, créeme que te hubiese soltado cosas horribles, pero no lo he hecho.

Estoy rodeado de cosas que me hacen mucho daño, por eso no quiero escudarme prefiero sonreír y hacer feliz a la gente.
Si sonrío antes las adversidades malo, y si me escudo en hacer daño me siento mal.


1 comentario:

  1. bueno Unai, que sepas que para mi eres genial, ahora y siempre, y esto no son solo palabras, es realmente lo que siento

    ResponderEliminar